El declive de Davos: ¿logrará sobrevivir el Foro Económico Mundial?
- anitzeld
- 6 ago 2024
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 20 oct
El Foro Económico Mundial (WEF), con sede en Suiza, atraviesa su mayor crisis desde su fundación en 1971. Tras una serie de denuncias internas contra su fundador, Klaus Schwab, de 87 años, y su esposa, el foro encargó una investigación independiente al bufete Homburger. El informe, de 37 páginas, concluyó que no hubo conductas delictivas, aunque sí irregularidades administrativas, confusión entre gastos personales y laborales, y una gobernanza deficiente.
Pese a ser exonerado legalmente, Schwab perdió el apoyo de la junta directiva y renunció tras 54 años al frente del foro. Se acordó una indemnización económica y su retiro formal, pero no se le permitió conservar el título de presidente honorario. La salida provocó una fractura interna: el presidente interino, Peter Brabeck-Letmathe, también dimitió denunciando un “ambiente tóxico”.
El liderazgo temporal recayó en Larry Fink (BlackRock) y André Hoffmann (Roche), quienes intentan estabilizar la institución y preparar la reunión de Davos 2026, considerada decisiva para el futuro del foro.
La crisis del WEF simboliza el declive del orden global posterior a la Guerra Fría y el fin de la era de la globalización optimista que Davos representaba. Hoy el foro enfrenta desconfianza hacia las élites, competencia de nuevos espacios como la Iniciativa de Inversión Futura de Riad y los foros chinos, y un mundo cada vez más fragmentado y multipolar.
Pero después de Davos 2026, el WEF deberá encarar un reto aún más profundo: seguir siendo relevante. Hay voces críticas que aseguran que el contenido de sus reuniones se tornó insulso y en sus paneles predomina un pensamiento convencional. «Antes era innovador. Ahora es políticamente correcto y se le observa dominado por patrocinadores como las consultores. Nadie quiere ir a Davos a escuchar lo que Macron tiene que decir».Aunque el informe exoneró a Schwab, su figura quedó dañada y su legado, en entredicho. Expertos señalan que el WEF deberá reinventarse estructural, cultural y políticamente para seguir siendo relevante. La cita de Davos 2026 será una prueba de fuego: si fracasa, podría sellar el fin de la era Davos.
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